Tenia un hueco sin un diente y se me estaba deteriorando el hueso. Pedi presupuestos en diferentes clinicas y en casi todas costaba parecido. La diferencia fue que en esta me hacían también un tratamiento de las encías, una limpieza y usaban factores de crecimiento para conseguir mejores resultados. Y todo esto sedado sin pasar ningún calvario. Con el resultado estoy tan contento que al verlo en el espejo ya no se cual es el implante y cual el diente.
Hace unos dos años, cuando faltaba poco para mi boda, en un viaje a Roma, comiéndome un helado noté algo muy duro y me asusté. Cuando me di cuenta de que era un diente que se me había partido. Acudí a un dentista y pudo salvar una parte del diente, aunque la mayoría me lo tuvieron que quitar porque estaba en muy mal estado. Pudieron ponerme un tornillo y luego una funda de porcelana. Desde entonces todo fenomenal, no tengo ninguna queja. La verdad es que lo recomiendo, no tuve ningún problema ni lo he tenido en todo este tiempo.