Quería eliminar las manchas. Mi temor era que la cara se me fuera estropear, es decir, que no me regenerara bien la piel. Fueron lentos pero finalmente alcancé mi objetivo. Lo más difícil fue verme la cara con costras.
Me hice un tratamiento de dermoabrasión. Estuve mudando la piel durante días, con un aspecto que daba miedo, pero que ya me habían avisado que pasaría. Pero, lo peor fue el resultado final, porque fue un poco nulo. No conseguí el efecto que buscaba en mi piel y es un poco decepcionante.