Hace cinco años me operé con el doctor Vicente Ferrer, pesaba alrededor de 115 kg midiendo 1,65. He adelgazado unos 50 kilos. El poco dolor que se siente es muy tolerable con los analgésicos que te dan, como una especie de gastroenteritis, no más. El doctor, y su equipo de nutrición y psicólogos son de lo más profesionales. Es cierto que la operación no es algo milagroso, que tienes que aceptar unos nuevos hábitos y reeducarte sobre alimentación, pero es un gran empujón que te cambia la vida. En mi caso un éxito. Ahora siempre peso entre 62 y 65 kilos y me es muy fácil mantenerme.
Siempre he sido una persona normal (nunca he sido delgada delgada, pero no estaba obesa) en lo que a peso se refiere, pero hace ya como 15 años dejé de fumar y eso unido a un divorcio un poco tormentoso que me provocó bastante ansiedad, hizo que los kilos se me fueran acumulando uno detrás de otro y a pesar de que todas las Navidades me prometía que este año me ponía a plan, pues al final las dietas nunca me iban bien, o las dejaba a la mitad, o eran tan estrictas que cuando las dejaba recuperaba todo el peso que había perdido en dos meses, comía muy mal, lo primero que encontraba en el frigorífico o me pasaba por algún sitio de comida rápida,todo un desastre. Una de mis hijas estuvo buscando profesionales aquí en Sevilla que fueran especialistas en obesidad y dio con el Doctor David Molina y aunque me costó un poco acudir a consulta porque me daba respeto lo que pudiera decirme, al final fui y creo que ha sido una de las mejores decisiones que he tomado en mi vida. Tuvimos varias entrevistas hasta que me decidí; tengo que decir que tiene una paciencia infinita y conmigo se ha ganado el cielo porque todos los días me surgían dudas, que desde luego supo disipar siempre; es por esto que me puse en sus manos. Hace ya casi 10 meses que me operó y no voy a decir que todo haya sido un camino de rosas pero desde luego no es nada que no compense hacer; la calidad de vida que tengo ahora no es la de hace casi un año y he aprendido a comer de una manera responsable y saludable para mi cuerpo y mi mente. Mi estado físico ha mejorado muchísimo, pero también el mental. Sólo puedo darle las gracias