Me hice una rinoplastia. Investigando por internet tenía un poco de miedo porque todo el mundo decía que era superdoloroso y que se te ponía todo negro ... Pero en mi caso ni me dolió ni se me amorató prácticamente nada.
Con 15 años comenzó mi complejo de la nariz, aunque todo el mundo me decía que mi nariz estaba perfecta. La idea de que mi nariz no quedaba bien con mi cara no me la quitaba nadie de la cabeza. Con 20 años comencé a buscar clínicas y a pedir presupuestos para una posible rinoplastia. Los presupuestos oscilaban entre 4000 y 7500 euros, precio que para una estudiante eran más que imposible de afrontar, además de no tener el apoyo de tu familia que por encima de todo te veían guapa. Con 26 años y unos pequeños ahorros, volví a visitar clínicas y a pedir presupuestos hasta que acudí a la clínica Dorsia Castellón donde la calidad y el precio se cumplen de verdad. La confianza y la atención recibida me convencieron para tirar para adelante con la cirugía. Hoy en día estoy eternamente agradecida a la clínica y al Dr. Miguel Fernández. De lo único que me arrepiento es de haber esperado tantos años, algo que realmente yo lo tenia claro desde el principio.