Volví a nacer un 3 de julio de 2018 gracias a las manos del Dr Jordi Pujol. Lo que provocó que me hiciera dicho tratamiento fue el hecho de que padecía un dolor insoportable en mis articulaciones, tenía nódulos de grasa en el hígado y mi día a día era muy pesado. Al principio cuando me dijeron el diagnóstico de que padecía obesidad mórbida se me cayó el mundo al suelo y cuando llegue a casa me puse a llorar desconsoladamente. Una vez realizada la operación lo más duro fue estar tres meses comiendo caldos y purés. Ahora por suerte mi cuerpo se ha adaptado bien a la comida sólida y gracias a la educación nutricional que he recibido en opción médica pues se ajustar bien las cantidades de comida y que alimentos son saludables y cuáles no.
Había hecho todas las dietas del mundo, perdía peso y al tiempo ganaba el doble, tenía ansiedad con la comida. Soy joven, tengo 27 años y cuando decidí operarme tenía 25, había llegado a mi límite, y decidí ponerme en manos del Dr. Molina. Estas cosas al principio dan miedo y tienes muchas dudas, pero tanto él como su equipo estuvieron conmigo y con mi familia en todo el proceso, así que los nervios fueron menos. Sólo me arrepiento de no haberlo hecho antes, he perdido todo el peso que me sobraba y he pasado a tener un peso normal para mi edad y estatura, ahora estoy sobretodo sana y además me siento bien conmigo misma.