Hace unos años me hice un piercing en la parte superior del labio. Cuando decidí dejar de usarlo se me quedó una cicatriz fea como metida hacia dentro. Como es un lugar muy visible decidí buscar una solución. Mi miedo era que el resultado fuera más visible que la cicatriz que ya tenia. Bueno, fue rápido simplemente me "refrescaron" la cicatriz la abrieron y cosieron los bordes, me pusieron un solo punto. Nada doloroso aunque al tratarse de una zona con tantos micro vasos sanguíneos el primer día sangre un poco. No es una operación, solo un tratamiento. No tuve que hacer nada más que volver a acudir a la clínica a la semana para que me retiraran el punto. Ni curas ni nada, porque al salir te ponen una pequeña gasa que tienes que mantener puesta toda la semana. Cuando me retiraron el punto si me estuve poniendo cremas cicatrizantes y sobre todo protector solar alto. El resultado es mejor que si no me hubiera realizado el tratamiento, la marca es mucho más discreta y mas fácil de disimular con maquillaje ya que es plana, no metida hacia adentro como estaba antes. No queda como si nunca hubieses tenido algo ahí, pero yo estoy contenta y lo recomiendo.
A raíz de un desafortunado accidente en motocicleta me quedaron unas cicatrices en ambas rodillas muy feas que quería corregir. El resultado ha sido más que satisfactorio, trato y atención profesional.