Ahora puedes disfrutar de la comida y llevar una vida normal
Las muelas estaban picadas y para comer era un suplicio, cuando esto tiene que ser un placer aparte de una necesidad. Con los implantes mi vida ha mejorado muchísimo ya que ahora puedo comer tranquilamente la comida y llevar a cabo una vida normal en todos los sentido. Lo vine a conocer, me encantó el trato que me dieron, las explicaciones y si tuviera que volver a hacerlo, volvería sin dudarlo.