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Las verrugas en el cuello y la cara: cómo tratarlas
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Cuando pensamos en los signos de envejecimiento solemos quedarnos con las arrugas, las manchas en la cara o la flacidez. Sin embargo, y aunque muchas personas lo desconozcan, la aparición de verrugas en el rostro o en el cuello es otro efecto más del paso del tiempo en nuestra piel. Aunque no el único.
Las verrugas son pequeños bultos redondeados o planos cubiertos con una capa gruesa y escamosa que, aunque por norma general no suelen ser dolorosos ni peligrosos para la salud, resultan antiestéticos y a menudo pueden resultar incómodos.
Con los años, nuestras células más superficiales de nuestra piel se multiplican más de lo habitual, dando lugar a un engrosamiento y a la formación de estos bultos de apariencia rugosa.
Sin embargo, esta afección es además muy común entre el resto de la población y en la mayoría de casos está causada por el virus del papiloma humano (VPH), cuando éste entra en la piel a través de cortes o heridas. El VPH es altamente contagioso, por lo que es importante tratarlas cuanto antes y de manera adecuada. Para ello, siempre es recomendable acudir a la consulta de un médico que nos ayude a determinar cuál es la mejor opción de tratamiento y, evitar así la propagación y aparición de nuevas verrugas.
Causas de la aparición de verrugas
Cuando no hay una infección por el VPH la aparición de verrugas suele ser causada por una predisposición genética, cambios hormonales, sobrepeso, e incluso una diabetes mal controlada.
Pero más allá del paso del tiempo y del engrosamiento de las células de la piel, uno de los principales factores causantes de la aparición de verrugas en el rostro y en el cuello es el contacto directo con alguien infectado por VPH, ya que el virus se transmite fácilmente cuando hay contacto directo, por ejemplo con besos o caricias faciales. Compartir cosméticos como maquillaje, delineador de ojos y pintalabios puede provocar la propagación del virus.
Del mismo modo, el contacto con objetos como toallas y ropa utilizadas por una persona afectada con el virus, también puede causar la aparición de verrugas faciales y cervicales, ya que dichos objetos contienen restos del VPH.
Por último, otro de los motivos más comunes de la aparición de estas verrugas es el contacto con áreas ya infectadas por VPH. Cuando nos tocamos una zona infectada y no nos lavamos las manos después, el virus se propaga fácilmente a través de los dedos y puede provocar la aparición de nuevas verrugas en otras áreas de la piel.
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Tratamientos médicos
Existen multitud de tratamientos y opciones para tratar las verrugas, algunos de ellos disponibles en farmacias y parafarmacias para poder ser llevados a cabo en casa con gran facilidad. Sin embargo, para evitar posibles riesgos y lesiones en la piel así como para asegurar la efectividad del tratamiento, siempre es recomendable acudir a la visita de un médico especialista o dermatólogo que pueda hacer un diagnóstico y recomendar el procedimiento más adecuado.
Una opción muy común son los medicamentos con receta: cremas tópicas, inyecciones o productos líquidos que se aplican directamente en la verruga para eliminarlas. Este tipo de tratamientos pueden ser eficaces dependiendo del tamaño y el área donde se encuentre localizada la verruga, por eso es importante que haya una valoración médica. Algunos pacientes pueden experimentar cambios temporales en el color de la piel tras el tratamiento.
Por otro lado, existen procedimientos más invasivos, especialmente indicados para verrugas de mayor tamaño y resistentes a otros tratamientos:
Crioterapia: este procedimiento se basa en el uso de frío extremo para destruir los tejidos anormales o dañados. El procedimiento debe realizarse en una clínica o consulta médica. El médico especialista aplicará una solución líquida helada en la verruga con el fin de destruir las células anormales. Se trata de un tratamiento muy eficaz para tratar las verrugas en la cara, aunque si no se eliminan todas las células infectadas, éstas pueden volver a aparecer.
Láser: la tecnología láser emplea un dispositivo que emite un haz de luz intensificado para destruir los tejidos anormales o dañados y las lesiones cutáneas, como las verrugas. El uso del láser permite destruir el tejido anormal sin dañar los tejidos de alrededor, por lo que se trata de un tratamiento preciso, rápido y eficaz para eliminar las verrugas faciales y cervicales
Cirugía: la cirugía es un tratamiento muy efectivo para la eliminación de las verrugas del rostro y del cuello, aunque más invasivo que los vistos hasta ahora. Este procedimiento requiere que el médico especialista realice incisiones quirúrgicas bajo anestesia local o general. De este modo el médico puede extirpar la verruga de raíz con un bisturí o láser y así evitar que vuelva a crecer. Esta técnica está indicada especialmente para verrugas más grandes o resistentes a otros tratamientos.
Quimioterapia: quizás no es un tratamiento tan conocido, pero resulta altamente eficaz. En esta técnica se emplea el uso de medicamentos especiales para matar o inhibir el crecimiento de las células cancerosas y las anormalidades cutáneas. El principal objetivo de la quimioterapia es destruir las células anormales sin dañar las células sanas. Se puede aplicar en forma de crema, aerosol o inyección directamente en el área afectada. La quimioterapia como procedimiento para eliminar verrugas está especialmente indicada para los casos de verrugas faciales difíciles de eliminar con otros métodos.
Si bien todos estos tratamientos tienen alta efectividad es importante tener en cuenta que las verrugas a menudo pueden reaparecer incluso después de haberlas eliminado con éxito. Por este motivo es importante seguir las instrucciones del médico sobre cómo prevenir su reaparición.
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Cuidados caseros para prevenir y tratar la aparición de verrugas
Más allá de los tratamientos médicos, es posible seguir ciertos cuidados en casa para prevenir la aparición de nuevas verrugas o tratar las ya presentes como por ejemplo aplicar cada día compresas calientes, vinagre o aloe vera para reducir su tamaño e inflamación y hacerlas menos visibles, llevar una vida saludable evitando la exposición al sol, y mantener la piel limpia y seca.
Por último, otra de las opciones de tratamiento casero es el uso de cremas antimicóticas. Éstas contienen ácido salicílico que ayuda a disolver la capa superior de la verruga reduciendo así su tamaño.
Artículos de referencia:
Eske, J. (2019, 20 de noviembre). How to get rid of warts on the face. Medical and health information. https://www.medicalnewstoday.com/articles/327066#causes
Saez, A. (2022, 13 de agosto). Cómo eliminar las verrugas que salen en el cuello. ELLE. https://www.elle.com/es/belleza/cara-cuerpo/a40099867/verrugas-cuello-soluciones/
