El trasplante capilar es un procedimiento quirúrgico que, como toda cirugía, requiere máximas garantías de seguridad.
La elección del equipo médico y del centro debe basarse en la experiencia de los profesionales y los protocolos que respaldan el procedimiento.
El trasplante capilar puede transformar la apariencia y mejorar la autoestima, pero jamás debe comprometer la salud. La información y la elección responsable son la mejor garantía.