Exceso de piel

¿Qué se entiende por exceso de piel?

perder peso

La etapa de pérdida de peso

Todo proceso de pérdida de peso también incluye una etapa de remodelación corporal, permitiendo así al paciente aprender a llevar una nueva vida en su nuevo cuerpo. Sin embargo, en los cambios drásticos o en casos de obesidad en los que se ha bajado una gran cantidad de kilos, la piel puede no adaptarse a los nuevos volúmenes, dando lugar a lo que se conoce como el exceso de piel. Este exceso de piel y la apariencia flácida del cuerpo pueden tener repercusiones psicológicas significativas en quienes lo padecen.

La pérdida de peso ante la obesidad puede pasar por:

Cuando aumentamos de peso, nuestra piel se estira para dejar espacio al tejido graso. Luego, cuando perdemos peso, la grasa se elimina sin darle tiempo a nuestra piel a recuperarse y adaptarse a nuestro nuevo cuerpo. Así pues, cuanto más rápido perdemos peso, más se relaja y afloja la piel. La elasticidad de la piel depende de cada persona pero si la pérdida de peso es importante, tu cuerpo terminará con "piel en exceso".

Tratamientos

Exceso de piel

Exceso de piel abdominal

El tratamiento quirúrgico solo se puede realizar cuando el peso se estabiliza, lo que suele llevar al menos 6 meses. Las cirugías reparadoras post adelgazamiento son cirugías que tienen como objetivo mejorar la figura pero no están dedicadas a la pérdida de peso en sí.

Las zonas afectadas y sus cirugías

  • El tórax

La pérdida de peso conlleva una pérdida de volumen mamario, por lo que el tórax tendrá un efecto de caída y vaciado si la pérdida de peso es importante. Este fenómeno se denomina ptosis mamaria. En estos casos la operación principal es la mastopexia (levantamiento de senos) para levantar y sujetar el tórax. Esta cirugía se puede combinar con un aumento de senos con prótesis o con lipofilling si el seno ha perdido demasiado volumen.

  • El vientre

El exceso de piel ubicado en el vientre se conoce también como bolsa abdominal. En este caso el vientre cuelga hasta el pubis, y a menudo el colgajo es circular, rodeando todo la cintura ya que la pérdida de peso afecta también a la espalda. Para volver a poner la piel en tensión tanto del abdomen como de la espalda, es decir todo el tronco, será necesario realizar un bodylift, Si solo es necesario tratar el abdomen el especialista aconsejará una abdominoplastia.

  • Los glúteos

Para corregir el exceso de piel en los glúteos es posible realizar dos intervenciones. Por un lado el bodylift permitirá el levantamiento de glúteos (superior y/o por debajo de los glúteos). El lipofilling es la técnica indicada para devolver volumen y embellecer los glúteos. El objetivo de ambas intervenciones es tensar la piel y dar forma a los glúteos. Según la cirugía elegida, las cicatrices serán más o menos extensas y visibles.

  • Los brazos

La cara interna de los brazos se ve muy afectada por la pérdida de peso. La piel está tirante y puede quedar un exceso de grasa residual almacenada. Para ello, el lifting de brazos, también conocido como braquioplastia, permite tensar la piel de los brazos y puede combinarse con una liposucción para eliminar los depósitos de grasa resistentes.

  • Los muslos

La piel de los muslos es muy fina, por lo que la piel colgante puede provocar fricciones dolorosas y generar complejos estéticos. La cirugía de muslos se llama cruroplastia (también llamada plastia crural). Se trata de un lifting de muslos mediante el cual se tensa la piel de la parte interior de la pierna. Dependiendo del paciente y de cada caso particular se abordará la cirugía de una manera u otra, que darán como resultados dos tipos de cicatrices: cicatriz en forma de T o cicatriz horizontal. Esta cirugía reparadora puede completarse con una liposucción para afinar y reducir la circunferencia del muslo.

  • El rostro

La pérdida de peso puede afectar al rostro, de hecho puede provocar un efecto de rostro hundido, o, en el caso de que la piel no se retraiga, un efecto de caída. Para remediarlo existe la técnica del lifting cérvico-facial o los hilos tensores, ambas opciones para estirar la piel. También es posible realizar inyecciones de relleno (ácido hialurónico) o de grasa (lipofilling) para devolver volumen al rostro. Si la piel no está demasiado distendida, existen otros tratamientos no invasivos para devolver la tonicidad y tersura al rostro, como la radiofrecuencia o los tratamientos con láser.

Las intervenciones se harán una a una, espaciando las operaciones varios meses para una buena cicatrización. Una buena hidratación diaria de la piel es fundamental para mantener la elasticidad de la piel y luchar contra la flacidez cutánea.

A pesar de las cicatrices que dejan estas intervenciones, son beneficiosas para que el paciente recupere la confianza en sí mismo, la autoestima, y elimine las molestias y dolores causados ​​por los roces y las úlceras que provocan los pliegues de la piel.

Cobertura de estas operaciones

Exceso de piel

Exceso de piel en brazos

La Seguridad Social solo cubre este tipo de cirugías en aquellos casos de pérdida masiva de peso que además conlleven trastornos funcionales y no solo estéticos (será un comité el que determine si procede o no). Además, la normativa puede variar de una comunidad autónoma a otra.

Bibliografía

"La información que aparece en esta web es solo orientativa y nunca puede sustituir la información que debe proporcionarte tu propio cirujano plástico, médico o especialista estético. Si estás valorando la posibilidad de realizarte algún tratamiento o intervención médica (también en caso de dudas o preguntas) dirígete directamente a tu médico especialista para que te proporcione la información correspondiente. Multiestetica no respalda ni recomienda ningún contenido, procedimiento, producto, opinión, profesional de la salud o cualquier otro material e información en esta guía o en cualquier parte de este sitio web."