Recupera hasta 1.000€ de tu tratamiento
Cada mes tienes la oportunidad de poder conseguirlo.
¡Guarda la factura y participa gratis!
Recupera hasta 1.000€ de tu tratamiento
Cada mes tienes la oportunidad de poder conseguirlo.
¡Guarda la factura y participa gratis!
Licenciada en Periodismo y Máster en Relaciones públicas y Gabinetes de Comunicación. Me encanta escribir y comunicarme con los demás. Actualmente, redacto contenidos en Multiestetica.
Es innegable, todos, absolutamente todos, tenemos alguna parte de nuestro cuerpo con la que no acabamos de sentirnos cómodos. No importa cuán seguros de nosotros mismos seamos o cuánto amor propio tengamos. Es algo inherente al ser humano. Lo que ocurre es que algunas personas lo aceptan, lo abrazan, y no le dan más importancia; y otras sin embargo, buscan soluciones.
Los retoques estéticos se han convertido en una práctica habitual hoy en día, incluso entre los más jóvenes. No es de extrañar; la sociedad actual vive en una constante presión social por la aceptación. ¿Y qué es “lo aceptado”? Sólo tienes que entrar en Instagram o Tik Tok para darte cuenta del patrón: retrasar al máximo y evitar el envejecimiento, y modelar el cuerpo a imagen y semejanza de las celebrities e influencers de turno.
Pero en ocasiones, la búsqueda constante de ese rostro y ese físico perfectos puede no acabar con un “felices para siempre”. No importa que lleves las fotos de la modelo con la nariz perfecta que quieres tener. A veces el resultado, aunque se haya ejecutado de manera impecable, puede no gustarte, y es que no olvidemos que las expectativas que tenemos no se pueden llevar impresas (además de que el “gusto” es algo totalmente subjetivo).
De hecho, se estima que el 5% de las personas que se someten a una cirugía estética se acaban arrepintiendo de su decisión. Entonces, ¿qué ocurre en estos casos? ¿Existe solución?
Relacionado: El boom de las cirugías plásticas de las influencers españolas
¿Es posible revertir una cirugía estética?
Pues depende. Empecemos aclarando que la mayoría de procedimientos quirúrgicos que se han realizado para responder a una demanda estética tienen solución. Esta solución es lo que se conoce en el sector como “el retoque”. Eso sí, supone volver a pasar por quirófano, con todo lo que eso conlleva, y en muchas ocasiones un gasto extra. Pero no podemos obviar que en algunos casos es mucho más sencillo que en otros.
Los aumentos de glúteos o de pecho son fácilmente reversibles puesto que únicamente es preciso retirar los implantes. Eso sí, se debe tener en cuenta que pueden quedar cicatrices visibles, y en el caso concreto de las cirugías mamarias, puede llegar a ser necesaria una recolocación del pezón. Además la elasticidad de los tejidos y los volúmenes se pueden ver afectados.
Pero cuando hablamos de intervenciones en el rostro como rinoplastias, blefaroplastias o liftings, la cosa se complica, sobre todo cuando a raíz de la cirugía se produce un cambio drástico en nuestra imagen hasta el punto de que no nos reconocemos en el espejo. Concretamente en el caso de las rinoplastias es prácticamente imposible hacer que una nariz vuelva a su estado original.
Antes de hacerte a un retoque
Quizás no te lo han dicho nunca, pero tras cualquier intervención estética somos mucho más vulnerables emocionalmente. De hecho, la gran mayoría de personas recién operadas experimentan lo que se conoce como disforia, una mezcla entre ansiedad y tristeza. Por eso es importante que tengas en cuenta los siguientes aspectos antes de arrepentirte y querer dar marcha atrás a tu operación:
Recuerda que el resultado final de la mayoría de intervenciones no se alcanza hasta el año, así que no te obsesiones, piensa que poco a poco volverás a reconocerte y sobre todo, estás más cerca del final.
Y si después de todo sigues pensando en hacerte un retoque valora si ese aspecto que no acaba de convencerte se puede mejorar o compensar con alguna otra cirugía o con un procedimiento médico estético en otra zona, sin necesidad de volver a pasar por quirófano.
Relacionado: Cuando el resultado no es el esperado: la cirugía plástica secundaria
Más vale prevenir que curar
A veces es cuestión de ser un poco precavido y como dice el refrán, evitar males mayores:
Y por último, pero no menos importante, en la medida de lo posible plantéate realizar un procedimiento de medicina estética en lugar de una cirugía. Y es que la mayoría de productos empleados hoy en día en los procedimientos estéticos son reabsorbibles con lo cual los efectos desaparecen al cabo de unos 6 o 12 meses, o, en el caso del Ácido Hialurónico, el efecto se puede revertir inmediatamente gracias a la Hialuronidasa.
Artículos de referencia
Instituto Maxilofacial (2021) No me Gusta Mi cara después de mi cirugía ortognática, Instituto Maxilofacial. Available at: https://www.institutomaxilofac... (Accessed: November 21, 2022).
Telemundo (2019) ¿Qué pasa si te arrepientes de tus Cirugías Estéticas?, TELEMUNDO.com. NBC News. Available at: https://www.telemundo.com/show... (Accessed: November 21, 2022).
Martínez, I. (2018) ¿Deshacer los errores de la Cirugía Plástica? no siempre, Harper's BAZAAR. Harper's BAZAAR. Available at: https://www.harpersbazaar.com/... (Accessed: November 21, 2022).
La información que aparece en Multiestetica.com en ningún caso puede sustituir la relación entre el paciente y el médico. Multiestetica.com no hace apología de un producto comercial o de un servicio.