Recupera hasta 1.000€ de tu tratamiento
Cada mes tienes la oportunidad de poder conseguirlo.
¡Guarda la factura y participa gratis!
Biopolímeros: qué son, dónde están y cómo retirarlos
Foto de drvaldes.es
Contacta con centros Verificados que puedan ofrecerte el tratamiento.
Los biopolímeros sintéticos son sustancias que se utilizaban para rellenar partes del cuerpo como los labios o los glúteos y que, en muchas ocasiones el cuerpo ha rechazado al percibirlo como un cuerpo extraño. Veamos cuáles eran los biopolimeros más utilizados y cómo retirarlos.
La definición estricta de los polímeros dice que es una combinación molecular donde dos o más moléculas forman una nueva en la que se repiten unidades moleculares a raíz de la original. Existen los biopolímeros naturales como las proteínas, polisacáridos y ácidos nucleicos y los sintéticos, entre los que destacan los poliuretanos o la silicona. También existen los biopolímeros derivados de los naturales que suelen utilizarse para producir plásticos que tienen diversos usos.
Sus aplicaciones en cirugía estética fueron múltiples durante un tiempo pero ahora lo que se busca es su extracción ya que aunque, no en todos los casos, sus efectos adversos se hacen evidentes, puede suponer complicaciones para los pacientes a más largo plazo. Entre sus efectos secundarios es común una reacción del organismo que desemboca en inflamación y dolor, la expansión hacia otras partes del cuerpo que también perjudica y por último, el poco control sanitario que se tiene sobre este tipo de sustancias desencadena en infecciones y otras complicaciones.
Las manifestaciones clínicas más comunes de los biopolímeros a corto plazo son: infección, inflamación, irregularidades, necrosis en la piel, abscesos, úlceras, fístulas, etc. Y a largo plazo, dichas manifestaciones son: cambios en el color de la piel o en la consistencia, quedando la zona muy dura debido a una reacción inmunológica. Además, sus efectos secundarios son dolor, fiebre, cansancio, somnolencia, malestar general, dolores articulares e, incluso, depresión o sensación de estrés.
Los biopolímeros que se han utilizado para estética buscan el aumento de volumen en diferentes zonas del cuerpo y están compuestos por derivados del petróleo (vaselina), de origen vegetal o animal y otros sintéticos como la silicona. Las zonas del cuerpo donde se solían utilizar son:
- Cara (pómulos, mentón, labios…)
- Glúteos
- Senos
- Pantorrillas
- Diferentes músculos
Artículos relacionados: Queiloplastia
Los efectos de la silicona líquida
La gran presión social que estamos viviendo en esta sociedad actual, marcada por un estereotipo a seguir y por unos cánones de belleza muy lejanos de la realidad, han conseguido que muchas personas tomen decisiones erróneas, pudiendo poner la salud en riesgo. Si a eso le sumas, que hay muchos pseudo profesionales del mundo de la estética que sólo buscan lucrarse a toda costa, pues tenemos la combinación perfecta para el desastre.
Labios deformados, pómulos torcidos, pechos doloridos y asimétricos, glúteos voluminosos y caídos más un largo etcétera son las barbaries que muchos centros estéticos se están encontrando hoy en día. Es una tarea complicada lo que les queda a los cirujanos estéticos por realizar, extraer todo ese material inyectado de un cuerpo en el que ha podido llevar años y que ha migrado a lugares insospechables dentro del organismo.
Y es lo que está ocurriendo ahora mismo, decenas de pacientes de muchos países acuden a cirujanos estéticos en busca de una solución a un problema que ha dejado a muchas víctimas en la total desesperación, viendo sus rostros y cuerpos deformados como resultado de lo que un día pensaron en retocar...para estar mejor.
Tratamiento para la extracción de los biopolímeros
Cuando un paciente que ha sufrido complicaciones debido a la aplicación de un biopolímero llega a una consulta médica para someterse a la extracción, el médico deberá determinar varios factores:
El primer paso a seguir es realizar al paciente una resonancia magnética y así poder evaluar la cantidad de biopolímero que hay en el organismo, además de, observar las posibles migraciones que puedan haber. Es decir, si la aplicación se inyectó en los glúteos, la sustancia ha podido migrar a los genitales, lumbares, muslos, etc.
Si el médico observa que hay migración, determina las zonas más delicadas para extraer primero, siendo una de estas zonas la espalda. Hay testimonios de pacientes que sufren fuertes dolores permanentes del lumbago y sólo cesaron los dolores, una vez extraída la sustancia.
El problema de la migración de los biopolímeros en el organismo es un tema muy preocupante para los profesionales de la cirugía porque conlleva muchos riesgos y muchas complicaciones a la hora de extraerlos y, a pesar del auge de estos profesionales en la especialización en este tipo de cirugías, aún queda mucho por conseguir en este campo.
Saber que los biopolímeros se esparcen por el organismo en forma de canicas al libre albedrío, te hará entender la gravedad y la complicación de una extracción de este tipo.
Solicitar presupuesto
Extracción
La consecuencia más grave y que, desgraciadamente sucede en muchos casos, es la dificultad a la hora de la extracción de los biopolímeros. Es tan grande la demanda y tan complicada la tarea de extraer algunos biopolímeros de ciertas partes del cuerpo, que ya son varios los cirujanos que se están especializando en ello con diferentes intervenciones y tratamientos, entre las que encontramos:
- Técnica abierta: a través de pequeñas incisiones se extrae el biopolímero de la zona donde se aplicó y a las colindantes donde se haya podido extender. Esta técnica se está especializando ya que, en muchos casos, no es efectiva 100% por la dificultad de acceso.
- Láser: A través de energía lumínica se disuelven las sustancias hasta convertirlas en líquido y, posteriormente, se eliminan mediante el láser.
Sin embargo, aunque se está trabajando en ello, ninguna de las dos técnicas tiene un total porcentaje de éxito. Son muchas las personas que nunca más verán sus rostros naturales como antaño podían ver. Estas personas quedarán marcadas de por vida.
La mejor solución es acudir a centros certificados y profesionales titulados que eviten el uso de este tipo de sustancias y recuerda estos dos puntos:
- Cerciorate de lo que te van a inyectar. Actualmente, cada jeringuilla inyectable tiene un registro de número de serie y lote.
- Hoy en día cuentas con el acceso a las diferentes sociedades científicas (SECPRE) sobre qué profesionales y centros estéticos están autorizados para realizar este tipo de intervenciones.
