Técnica Pose

POSE Reducción de estómago

Unidad de sobrepeso y obesidad - Clínica Rinos

En la Unidad de Sobrepeso y Obesidad estamos especializados en el asesoramiento y tratamiento médico-quirúrgico de la obesidad, ofreciendo a nuestros pacientes alternativas responsables, honestas y experimentadas para que puedan afrontar su sobrep

La técnica POSE es una técnica altamente especializada y que, por tanto la patente exigida por los que hemos sido elegidos para realizarla, hayamos tenido un amplio currículum en experiencia endoscópica, y aparte realizar una serie de cursos de acondicionamiento para tener las aptitudes y poder localizar. Por lo tanto debe realizarse siempre por gente que sea altamente especializada en este tipo de procedimiento o técnica, pues hasta el día de hoy nos está dando unos resultados gratamente positivos, puesto que los resultados en pérdida de peso están siendo más que óptimos, llegando a niveles realmente de perdidas de sobrepeso muy muy adecuadas.

Se estima que la pérdida total de peso tiene que ser del 60 al 70% como mínimo del sobrante. A otro nivel, lo que también nos ha llamado la atención es que en en el postoperatorio la técnica está tolerando excelentemente bien, puesto que los pacientes solo refieren ligeras molestias al nivel de la boca del estómago y poquita cosa más. Con lo cual el seguimiento de todo el cambio de hábitos está haciendo muy adecuadamente el paciente, que se somete a una técnica POSE, adelgaza por dos vías, una que es la lógica que es por la reducción mecánica de la cavidad del estómago, es decir, que estamos ante un estómago más pequeño, sobre todo de la porción más alta del estómago, pero sobre todo por otro mecanismo muy interesante, que es la alteración hormonal del control del apetito, que juega claramente a favor de la saciedad continuada.

El paciente, una vez realizada la intervención, suele tener una estancia hospitalaria de corta duración. Pueden ser de 3 a 4 horas en los casos más favorables, hasta máximo de un día de estancia hospitalaria. Posteriormente mantienen unas mínimas molestias a nivel de la entrada del estómago, que se controlan con la medicación convencional y a partir de ese momento impera la saciedad y la sensación de no apetito, con lo cual podemos empezar nuestros programas de adaptación, unos nuevos hábitos de vida.

La principal ventaja del POSE frente al balón es, fundamentalmente, el tiempo de duración del efecto de este tratamiento sobre la saciedad, así como el balón provoca un tratamiento durante un año en el que el paciente no tiene apetito, este tratamiento con los pliegues intragastricos permanece durante más tiempo, con lo cual la sensación de saciedad es más duradera y el tiempo para nosotros poder modificar los hábitos alimenticios y de vida es mayor, con lo cual la eficiencia es más alta. Le podemos recomendar al paciente en el cual está indicado y eso no quiere decir que tenga contraindicaciones para su realización de cirugías abdominales mayores, no tiene ninguna alteración de la coagulación y otras enfermedades que valoraremos en la primera visita de entrevista con el paciente, también debe tener un preoperatorio completo con electrocardiograma, una analítica completa y una radiografía para poder ver que no existe ninguna contraindicación física de estómago para poderlo realizar. Una vez ha pasado todo, lo que debemos pensar es que el índice de masa corporal es el que debemos tratar con el POSE, y así como explicamos también con el balón. El índice de masa corporal nos dice el riesgo de enfermedad asociada a obesidad.

Cuando nosotros, por altura y peso, calculamos este índice, sabemos que entre 20 y 25 es peso ideal, de 25 a 30 sobrepeso, de 30 a 35 es obesidad grado 1, de 35 a 40 grado 2, y más de 40 obesidad mórbida. Por tanto, nosotros recomendaríamos a los pacientes con obesidad grado 1 y 2, especialmente, entre 30 y 40 de índice de masa corporal, aunque en determinados casos, índices mayores de hasta 45 son aceptados. Cuando el paciente tiene alguna contraindicación para otros tratamientos más agresivos, el paciente que se somete a un POSE necesita un seguimiento multidisciplinar, igual como todas las técnicas en las que se intenta intervenir sobre los hábitos alimentarios y de estilo de vida, evidentemente tiene que ver la nutricionista y de unas pautas claras para que aprovechemos esa sociedad, que le permite crear unas conductas diarias de alimentación, aparte de tener las actividades físicas que permitan perder más calorías, y además debe existir un apoyo psicológico en el caso concreto de algún paciente, lo preciso para que no se quite la ansiedad con trastornos de alimentación.