Llevo toda la vida sin sonreír y ahora que me estoy arreglando mi boquita por fin voy a poder hablar sin vergüenzas y sobre todo reír, porque reír es vivir y yo he estado muerta
Los puentes coronarios se me caen cada 2 ó 3 meses. Es un calvario ir de comidas sabiendo que se puede caer y al final se cae. Todas las promesas del director son falsas y encima te comentan que no se puede hacer mas. Sigo pagando religiosamente sin que el tratamiento aconsejado surja efectos beneficiosos para nada.