Quería mejorar mi piel. Tenía miedos a los efectos secundarios.
Por primera vez me he sometido a un tratamiento de bótox, estaba un tanto intranquila del resultado ya que "la cara es el espejo del alma", pero he quedado muy contenta. Me hice el tratamiento en la Clínica Dorsia de Alicante, en Avenida Aguilera. El trato y un gran asesoramiento hizo que confiara en ellos y el resultado ha sido muy bueno y muy natural, lo que buscaba!!!